El imaginero extremeño fue maestro de maestros

La talla de la Virgen de los Dolores, obra del reconocido Eduardo Pino

Su hermandad descubre la marca del autor durante los trabajos de restauración de la imagen

Tras muchos años de estudio, la Hermandad de la Virgen de los Dolores ha descubierto qué artista talló la imagen de su titular. Fue adquirida en los años 40 del pasado siglo en los Talleres Granda de Madrid, pero se desconocía la autoría. Durante su restauración se ha encontrado en la planta del pie la marca del reconocido Eduardo Pino, maestro de artistas como Ortega Bru.

Todos los indicios e investigaciones realizados hasta la fecha por la Hermandad de la Virgen de los Dolores apuntaban al artista Eduardo Pino Lozano (1911-1985) como el posible autor de esta imagen. Hace unas semanas se confirmó que es obra del reconocido escultor de Villanueva de la Serena. Fue durante los trabajos de restauración de la talla que ha realizado Alfonso Fiérrez bajo la supervisión de Javier Cabrero, conservador de la cofradía y licenciado en Historia del Arte.

Jesús Fernández-Pacheco, Hermano Mayor de la Hermandad de la Virgen de los Dolores confirmó la noticia y se mostró muy orgulloso por culminar así el proceso de investigación iniciado en 2011 y poder atribuir la autoría de su imagen “a un escultor de una trayectoria impresionante, maestro de maestros con obra en todo el mundo”.

Hace dos décadas, en la anterior restauración de la imagen a cargo de los hermanos Ortega Alonso, los sobrinos del afamado Luis Ortega Bru ya apuntaron la posibilidad de que esta talla, dada su calidad excepcional y peculiar policromía, fuera obra de Eduardo Pino, que fue su maestro. Pero no se encontraba ninguna prueba que lo confirmara ya que los artistas que trabajaban para Talleres Granda, por donde pasaron el propio Ortega Bru o Mariano Benlliure, no firmaban sus obras.

Sin embargo, durante la restauración que se ha realizado de la Virgen de los Dolores, se encontró la prueba definitiva. “En la planta derecha del pie, el restaurador encuentra la marca tallada de una hoja de pino”, explicó Javier Cabrero, que en todo momento ha supervisado los trabajos de restauración.

Los familiares de Pino Lozano, tras ver la fotografía de esa marca de pino, confirmaron que era la firma del afamado escultor, una noticia que ratifica la calidad del patrimonio cofrade que hay en Manzanares y que, según Jesús Fernández-Pacheco, puede ayudar a que la Semana Santa de esta ciudad tenga mayor reconocimiento “y consiga de una vez por todas la declaración de interés turístico por la categoría de sus imágenes”.

Eduardo Pino se suma al plantel de importantes imagineros del siglo XX que están detrás de algunas de las tallas de las cofradías de Semana Santa de Manzanares, como Luis Ortega Bru, Quintín de Torre y Navas Parejo, sin olvidar a otros actuales como Manuel Téllez.

El proceso de restauración de la imagen de la Virgen de los Dolores, que llegó a Manzanares en 1944, ya ha terminado. Presentaba algunas grietas y fisuras, además de suciedad sobre las capas de pintura que acabaron con su policromía original. Esta fue descubierta bajo uno de los brazos y se ha aplicado a toda la talla, que es de cuerpo entero.

Con el objetivo de apreciar todos los detalles de esta obra de Eduardo Pino, una vez restaurada, la Hermandad de la Virgen de los Dolores la expondrá a partir del viernes y durante lo que resta de noviembre en su oratorio. Será con una indumentaria distinta a la habitual. Llevará una saya de 1896, de la anterior talla, el manto original de los años 40 y dejará ver el cabello y pies, con sus sandalias originales. Después de ser expuesta, en diciembre regresará a la iglesia de la Asunción.